Por Teresa Aristizábal. ENS.
Con Iris y Eliana* nos encontramos a las 3 de la tarde de un domingo festivo en una cafetería ubicada en la esquina donde comienzan Las Mellizas, como se llama la calle principal de la parte alta del barrio Buenos Aires, al oriente de Medellín. Y allí, entre café con leche, empanadas, palitos de queso y agua en botella para mitigar la sed, se dio esta conversación.