Por: Elena G. Sevillano Madrid. El País.
Los impactos del calentamiento ya se notan en todo el mundo, alerta el último informe de la ONU crecerán en este siglo, si no se adoptan medidas. Un clima cada vez más extremo.
Los impactos del calentamiento global ya son visibles en todos los continentes y en todos los océanos, alerta el último informe del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que dibuja un panorama futuro muy lúgubre si los líderes mundiales no actúan a tiempo. De no adoptar medidas, el texto prevé que durante este siglo aumente el desplazamiento de poblaciones, sobre todo en zonas litorales que se verán afectadas por la subida del nivel del mar, las inundaciones y la erosión de las costas. El informe también alerta sobre el descenso de las cosechas, la extinción de especies y la degradación de los ecosistemas. Y apunta incluso al riesgo de que se produzcan conflictos violentos o guerras civiles.
Imagen desértica del lago Curulai, en la Amazonia brasileña, tomada por Greenpeace. / DANIEL BELTRA
El IPCC, la mayor red científica del mundo dedicada a estudiar el cambio climático, desvela hoy en Yokohama (Japón) la segunda de las tres partes de su extenso informe de actualización sobre la literatura científica del calentamiento, llamado AR5. Sus centenares de autores, escogidos por Naciones Unidas, han contado con más del doble de estudios que la última vez (el AR4 es de 2007) para elaborar informes que serán clave en las negociaciones de las próximas cumbres internacionales sobre el clima. El informe del Grupo I, divulgado en septiembre pasado, concluyó que la actividad humana es la responsable del cambio climático. Ahora el Grupo II presenta su revisión sobre sus impactos, la vulnerabilidad de los territorios y las posibilidades de adaptación.
El calentamiento en Europa
Menos glaciares, más sequía. El resumen para responsables políticos que presenta hoy el IPCC incluye unas tablas en las que se enumeran los impactos atribuibles al cambio climático desde el último informe de evaluación de los expertos, el llamado AR4, de 2007. En Europa, los científicos tienen claro que responden a esta causa el retroceso de los glaciares alpinos, escandinavos e islandeses o el incremento de las masas forestales quemadas en décadas recientes en Portugal y Grecia. También atribuyen al cambio climático la llegada temprana de aves migratorias desde 1970, el estancamiento de cosechas de trigo en algunos países y el cambio en la distribución de especies de peces en los mares europeos.
Erosión costera. Entre los riesgos futuros que destaca el informe está la erosión de la costa, las inundaciones de ríos y mayores restricciones de agua, sobre todo a causa de la mayor evaporación que se producirá en el sur del continente. El texto alerta también sobre los fenómenos de calor extremo, que afectarán a la salud, la productividad y el riesgo de incendio.
Los efectos del calentamiento global no son una amenaza futura e inconcreta, sino que ya pueden observarse en muchas regiones, asegura el IPCC en su resumen para los responsables políticos: fenómenos meteorológicos extremos como olas de calor, sequías y ciclones; cosechas menos abundantes; cambios en las precipitaciones que afectan el acceso a los recursos hídricos... Y el mundo está “mal preparado” para enfrentarse a los impactos futuros, añade la nota de prensa que lo acompaña. Un texto que se ha estado consensuando durante este fin de semana con los responsables políticos y que rebaja algunas de las previsiones incluidas en un borrador filtrado hace unos días. Estas son algunas de las alertas que lanza el informe:
Conflictos. Se prevé que el cambio climático aumente el desplazamiento de poblaciones durante el siglo XXI, especialmente en países en vías de desarrollo, señala el texto, que añade: “Indirectamente, puede incrementar el riesgo de conflictos violentos en forma de guerra civil y entre comunidades al amplificar factores instigadores de conflictos bien documentados como pobreza y perturbaciones económicas”.
Más pobreza. Los peligros relacionados con el clima “afectan directamente” a las vidas de los más pobres, porque impactan en sus medios de vida, en la reducción de las cosechas, en la destrucción de sus viviendas y, de forma indirecta, al aumentar los precios de la comida y la inseguridad alimentaria.
Costas. La previsible subida del nivel del mar durante el siglo XXI provocará inundaciones y erosión del litoral. Al mismo tiempo, las proyecciones muestran que el aumento de la población, el desarrollo económico y la mayor urbanización atraerán a más personas hacia zonas costeras, con lo que el peligro será mayor. El informe asegura que los costes de adaptación a esta realidad varían mucho entre países. En el caso de algunos en vías de desarrollo y de pequeños Estados insulares, hacer frente a los impactos y a los costes de adaptación puede suponer varios puntos porcentuales de su producto interior bruto.
Seguridad alimentaria. El calentamiento global, la subida del nivel del mar y los cambios en las precipitaciones afectarán a las tierras cultivables. Y no para bien, según el informe. En el caso de los principales cultivos (trigo, arroz y maíz), en las regiones tropicales y templadas, el texto habla de “impacto negativo” en las cosechas si la temperatura sube más de dos grados centígrados y no se toman medidas de adaptación.
Salud. El informe señala que la carga de enfermedad provocada por el cambio climático es pequeña si se compara con otras consecuencias y que no está bien cuantificada. Sin embargo, añade que ya hay evidencia de mayor mortalidad relacionada con el calor y menor con el frío en algunas zonas como resultado del calentamiento. Los cambios en la temperatura y la precipitación ya han alterado la distribución de algunas enfermedades transmitidas por el agua, añade. Los riesgos futuros incluyen problemas de salud en zonas costeras y pequeñas islas debido a la subida del nivel del mar y las inundaciones[RFC 1-5], así como en grandes poblaciones urbanas a causa de inundaciones tierra adentro. Hasta la mitad del siglo XXI, el impacto consistirá en “el agravamiento de problemas de salud ya existentes”. A más largo plazo, pero dentro del siglo, los científicos creen que empeorará la salud en regiones de países en desarrollo.
Océanos. Ya están notando los efectos del cambio climático: mayor calentamiento (provoca desplazamiento de especies marinas, como el bacalao atlántico hacia latitudes polares), acidificación y deficiencia de oxígeno.
Ecosistemas. Algunos hábitats “únicos y amenazados” ya están en peligro debido al cambio climático. Si la temperatura media sube un grado más, aumentará el riesgo de “consecuencias graves”. Con una subida de dos grados, el riesgo se ampliará a muchas especies con capacidad de adaptación limitada, especialmente en los arrecifes de coral y el Ártico. El texto alerta de que, si no se actúa, los cambios en algunos ecosistemas pueden ser “abruptos e irreversibles”.
Medio rural. El texto alerta del peligro que acecha a las zonas rurales debido al acceso insuficiente al agua potable y de riego, y del descenso de la productividad de las cosechas. Agricultores y pastores en regiones semiáridas serán los más afectados en un futuro próximo.
Acceso al agua. El informe asegura que los recursos de aguas superficiales y subterráneas renovables “se reducirán significativamente” en la mayoría de las regiones subtropicales, lo que “intensificará la competición por el agua entre sectores”.
El cambio climático altera la vida oceánica más rápido que en 65 millones de años
Aumento de la temperatura del agua, acidificación y deficiencia de oxígeno son los factores clave del impacto del calentamiento
EL PAÍS Madrid 28 MAR 2014 - 20:47 CET28
Archivado en: Calentamiento global Cambio climático Problemas ambientales Relaciones exteriores Ciencia Medio ambiente
El cambio climático actual y previsible está alterando las condiciones de vida en los océanos terrestres más rápido que en cualquier período comparable de los últimos 65 millones de años, afirman los biólogos que han preparado los capítulos correspondientes del borrador de informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas que se debate en Yokohama (Japón). Se trata de las conclusiones del segundo grupo de trabajo, sobre los impactos del calentamiento global, del Quinto Informe de Evaluación (AR5) del IPCC. La aprobación del documento final, con su resumen para los responsables políticos, está prevista para lunes 31 de marzo. El grupo de trabajo I, el de la física del clima, sacó su informe el pasado mes de septiembre.
“Como consecuencia del cambio climático, tres factores tienen un impacto que está alterando las condiciones de vida de los peces, los mamíferos, las algas y otros habitantes del océano”, explica Hans-Otto Pörtner, científico del Instituto Alfred Wegener (en Alemania) y responsable, junto con el estadounidense David Karl, de los capítulos del informe del IPCC dedicados a sistemas oceánicos. “El factor más importante actualmente es el calentamiento del océano, que ya está provocando cambios significativos: por ejemplo el desplazamiento de especies como el bacalao atlántico hacia latitudes polares”, señala el investigador alemán. “El segundo factor, la acidificación del océano se incrementará significativamente en las próximas décadas según las predicciones, y tendrá impactos sustanciales a nivel global así como en ecosistemas específicos. El tercer factor clave tiene que ver con la deficiencia de oxígeno y notamos sus impactos ya, por ejemplo, en regiones costeras donde el número de zonas de deficiencia extrema de oxígeno han aumentado significativamente”, concluye Pörtner.
En el AR5, los científicos especificarán estos factores con datos concretos y recogerán proyecciones para el futuro destacando los riesgos y los costes que generará el cambio climático, adelanta el Instituto Alfred Wegener en un comunicado.