Por Daniel Coronel
El grupo, que incluía a varios oficiales y suboficiales, no solo cumplía labores de inteligencia sino que había montado una banda especializada en secuestros. Una asociación criminal entre militares activos, paramilitares y pistoleros de la banda La Terraza estuvo detrás del homicidio de Jaime Garzón. La Fiscalía tiene –casi– todas las piezas del rompecabezas y sabe cómo encajan. Hay evidencias que muestran que integrantes del departamento de inteligencia B-2 de la Brigada 13 del Ejército en Bogotá estuvieron envueltos en el asesinato de Jaime. Algunos de estos militares están prófugos y otros siguen activos y libres de cualquier apremio.