Por: Daniela Collazos - Observatorio de Realidades Sociales
Un carrito repleto de solidaridad y una mesa dispuesta en la esquina, son los aglutinantes sociales con los que vecinos y vecinas del barrio La Paz y Omar Torrijos enfrentan una doble batalla contra el virus del hambre.
Estamos atravesando un episodio dramático para la vida humana, sin preparación alguna y con muy pocas provisiones pero con una capacidad emergente de reinvención; el Covid-19 es la urgencia universal que nos mueve cada día en busca de nuevas y prontas respuestas priorizando la salud y el bienestar de la población. Acción que, no solo está liderada por entidades gubernamentales, privadas, eclesiales, sino que también están aunando fuerza, dinamismo y liderazgo muchas organizaciones sociales y nuevos liderazgos que buscan contribuir al desafío humanitario que atravesamos; dado que, cada día la carencia alimentaria incrementa y la pobreza que se quiere ocultar, sale a flor de piel.
«organizaciones sociales unánimemente deciden caminar las calles de nuestros sectores, siendo lo más creativamente posible»
Por esta razón, las medidas de atención en el área de salud no paran y las gestiones de organizaciones sociales unánimemente deciden caminar las calles de nuestros sectores, siendo lo más creativamente posible, y con las medidas de bioseguridad para tener un gesto de generosidad con quiénes aún no han sido tenidos en cuenta por el Gobierno. A causa de estos fuertes tiempos, centrar la mirada a las iniciativas que surgen combatiendo la pandemia, es un buen indicador o una buena señal de tiempo: Sardiña, (2020) afirma: “Después de detectarse el primer caso de coronavirus en Colombia y ante el avance de las medidas de contingencia para evitar la propagación de la enfermedad, afloran las iniciativas ciudadanas y de colectivos para ayudar a sobrellevar el aislamiento de los sectores más vulnerables de la sociedad colombiana” (p.1)
De nuestros liderazgos surgen brotes de fraternidad, los impulsos no se quedan sólo en preocupación ni en temas de discusión y las esquinas vuelven a ser el punto de encuentro; esta vez acompañadas de expresiones cercanas que nos juntan: “Si necesitas Toma y si tienes Dona”, generando movimiento y afecto entre los habitantes del sector. Es así como Luis Durán, a quién familiarmente se le conoce como Chechi en el barrio la Paz de la comuna 13 del oriente de Cali, le pone un nuevo color a las solitarias y silenciosas calles del territorio, acción que fue abrazada por las personas cercanas, dejando en la mesa de la esquina lo que deseaba compartir con quien en el momento estuviera necesitando.
En efecto, la solidaridad en acción se extiende como motivación del vecindario al barrio Omar Torrijos, con el cercano y conocido carro de mercado, que circula por las calles dando y recogiendo lo que los mismos habitantes logran depositar en él hasta llegar al punto solidario, la esquina. El trueque ha sido la dinámica con la que los habitantes de estos barrios del oriente de Cali, mitigan el hambre, aportando su grano de arena hasta volver a sentir la presencia de quiénes tienen al lado. “Asocamacho y MADVI, han acompañado esta gestión barrial, ayudándonos a recordar que no estamos solos, y que las crisis gestan esperanza”, dice uno de los liderazgos de la zona.
Finalmente, estamos llamados a fortalecer la empatía, a reconocer que el liderazgo se alimenta del trabajo mancomunado y de la oportunidad que propicia este dramático momento. Allí va la vida en colectivo, volteando la esquina, con otro carrito de mercado lleno de solidaridad, siempre trabajando con ahínco para que la lucha del pueblo sea más firme y garantice sostenibilidad.