El pasado martes 23 de agosto 12 grupos de teatro de Bogotá recibieron amenazas de muerte por parte de las águilas negras de Bogotá, con este hecho se confirma que los grupos paramilitares siguen existiendo, y no solo en la capital, al contrario de lo que plantea el gobierno nacional, que pretende ahora llamarles bacrim. Llámense águilas negras, o bacrim el hecho es que en COLOMBIA LOS PARAMILITARES SI EXISTEN, y pretenden ahora intimidar al arte y la cultura, esto es en el marco de una sistemática política de estado que pretende acabar todo tipo de oposición, de resistencia, de pensamiento crítico, divergente, propositivo, recordemos que el actual presidente Juan Manual Santos, fue responsable en el gobierno de Uribe de los llamados falsos positivos donde aún se desconocen las cifras de los jóvenes de sectores populares dados de baja asiéndoles pasar por guerrilleros, recordemos que la semana pasada Diego Becerra un joven de 17 años fue asesinado por un policía, esto además en el marco de la ley de seguridad ciudadana que busca regular absolutamente todas las actividades de la sociedad civil y le da una serie de atribuciones para actuar a los policías. En la sociedad civil efectivamente también se encuentra USTED, así que no espere a que le llegue un panfleto a su casa, o que sus hijos sean flanco de la represión policial para actuar.