Por: Alfonso Insuasty Rodríguez*
Es preciso fortalecer la luchas, lo que incluye abrir nuevos proceso formativos que nos permita enfrentar una dificil época mediática, madiatizada, donde el espejismo politico se impone, la confusión y la incertidumbre, donde no todo es, lo que dice ser

Una larga historia de conflicto social, político y armado en Colombia, ha dejado más de 8 millones de víctimas (UARIV, 2016), cerca de 7 millones de desplazados, 7 millones de hectáreas despojadas, más de 80 mil desparecidos, un campo abandonado, un Gini de tierras de 0.86, consolidando así, amplios niveles de pobreza y miseria rural y urbana en todo el país. A esta realidad se suma el exterminio de la oposición social, política (sindical, partidista, estudiantil y artística). Este panorama da cuenta de una serie de razones para la Guerra, pero también de profundos y serios argumentos para la paz.
El Gobierno y la insurgencia armada, FARC-EP (una de las guerrillas más numerosas y de gran presencia en el territorio nacional), dieron un paso importante para intentar nuevamente la vía negociada y alcanzar la paz. Luego de 4 años de negociación, con permanente apoyo internacional, se ha logrado un histórico acuerdo para el fin del conflicto armado.
Son seis puntos centrales del acuerdo, firmados el 26 de septiembre en Cartagena, ante la comunidad nacional e internacional: Reforma Rural Integral, sustitución de cultivos de uso ilícito, Sistema Integral de Verdad justicia reparación y no repetición, participación política, fin del conflicto, cese bilateral y definitivo al fuego y dejación de armas (Gobierno Colombiano y las FARC-EP, 2016).
Estos se enmarcan en las normas del derecho internacional (DIH, Estatuto de Roma). Su centro son las víctimas, mujeres y comunidades étnicas; así mismo, una justicia transicional que contempla sanciones alternativas para quienes hayan tenido participación en el marco del conflicto armado (guerrilleros, militares, políticos, empresarios, etc) pero, para hacerlo se exigen altos niveles de verdad que garanticen reparación.
Muchos de estos acuerdos comenzaron a implementarse antes de la firma final, incluyendo la paulatina desmovilización y desarme de las FARC-EP, quienes en su décima conferencia interna, ratificaron su compromiso de hacer política sin armas. Así mismo, iniciaron la petición pública de perdón (El Espectador, 2015) en comunidades afectadas como Bojayá, La Chinita y en el mismo acto de la firma pública del acuerdo final (Redaccion Politica, 2016).
El presidente Santos, sabiendo que su re-elección en el 2014 (Redaccion Politica y EFE, 2014) ya era una refrendación del mandato popular para la Paz, y que el artículo 26 de la constitución colombiana de 1991 lo ampara: “La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento”, decidió someter los acuerdos a votación popular mediante un plebiscito, realizado el 2 de octubre.
La fuerza política del expresidente Álvaro Uribe, hoy senador de la República y líder del Partido Centro Democrático, una fuerza ultraconservadora de derecha, se opuso a la firma del acuerdo logrado tras la negociación y, a través de una campaña cargada de desinformación, odios y falsos discursos como lo reconoce su Director de Campaña Juan Carlos Velez uribe (La Republica, 2016), se acudió incluso, a una inadecuada referencia a la Fe religiosa, estrategia tan efectiva que dividió al país, logrando su meta final, la inesperada victoria del No.
Poco más de 50 mil votos fueron la diferencia, tres veces menos que los votos nulos. Se impuso un minoritario promedio de los disciplinados electores uribistas (6% de la población colombiana, 22% de la población habilitada para votar), un amplio sector de la sociedad no participó, un 62,59 % de abstención (Registradurìa Nacional de la Repùblica de Colombia, 2016) (principal ganador). Se impuso una población urbana que, por capacidad electoral, decidió por un conflicto armado que afecta mayoritariamente al sector rural.
Este resultado es sólo el síntoma de una sociedad históricamente conducida, por un sector altamente poderoso, que, gracias al uso de la fuerza como pedagogía del terror, o de los medios masivos de comunicación, la desinformación, el fanatismo religioso y la intolerancia encubierta de “mano firme”, ha logrado establecer un “sentido común” que identifica enemigos absolutos, miedos difusos, prolongando el odio, la guerra y la exclusión como estrategia de poder.
¿Qué nos queda?:
Por un lado, a las organizaciones sociales y populares, sectores unidos en la fe, iglesias cristianas, a hombres y mujeres hermanados por el sentir y pensar Franciscano, nos queda ahondar en la tarea formativa para potenciar ese otro país urbano y rural mayoritario, que, por la desinformación, el engaño o la baja formación política, se le dificulta escuchar su entorno, reconocer la diferencia, identificar sus verdaderos conflictos, pensar sus propias transformaciones; pero que posee gran capacidad para reconstruir país.
Recuperar y/o potenciar un sentir-pensar que incluye la dimensión y practica espiritual para la liberación del sujeto, de sus condiciones de opresión, para fortalecer el tejido social y la conexión con el medio ambiente, sobre las lógicas del amor, de lo humano, apartándose así de una espiritualidad sin contenido, dada para aumentar el odio y la ignorancia colectiva, masas irreflexivas y rabiosas, facilitadoras de ambientes y contextos sociales muy convenientes para mantener el estatus quo de pequeños grupos de familias o empresas muy poderosas..
Repensar y potenciar los proceso de formacion política colectiva, comunitaria, popular, obrera, campesina, interetnica, procesos multiples, diversos, que deben nacer, crecer, diversificarse, para atender otras epocas, otro momento histórico, esto incluye a las instituciones de educacion superior, que a pesar de ellas y en ellas, habrá que abrir estos espacios, pues los estudiantes jovenes y algunos docentes quieren aportar, pero no encuentran rutas en tanto las instituciones han sido capturadas por modelos cerrados.
Abrir grupos de discusión, de reflexion, debates abiertos, facilitar acceso a la informacion que nos permita estar al tanto, atentos, para evitar caer en los juegos políticos de las Elites Colombianas, aconstumbrada a ello; estar atentos para no ser manipulados ahora, en este ambiente de amplios espejismos políticos en donde no tood es, lo que dice ser.
Acompañar y profundizar las luchas por la defensa del territorio, del agua, del medio ambiente, del bienestar de las poblaciones, su actividad económica, las cuales parecen “sobrar” o “estorbar” a los intereses de las multinacionales a quienes se les viene regalando importantes regiones del país.
Ahondar las luchas por los derechos de grandes masas de excluidos en las ciudades, vivienda digna, acceso a servicios públicos, economía solidaria, articular campo -ciudad, esto en tanto el modelo de ciudad parece no contar con la voz activa y efectiva de quienes habitan la periferia o han sido exluidos.
Insistir en la construccion de Agendas sociales sectoriales, regionales, comunitarias, las cuales se pueden y deben irese articulando en una gran agenda nacional plural, colectiva, que transite hacia la configuracion de un plural y diverso proyecto de pais desde abajo con la fuerza par ser agenda pública a defender, es esta, una constante tarea pendiente.
Impulsar el inicio de la segunda mesa de negociación con la insurgencia del Ejercito de Liberación Nacional (ELN) para darle otra dinámica a estas apuestas de paz y más por el énfasis que hace esta guerrilla, en una participación real, efectiva, de abajo hacia arriba, que defina agendas locales en escala hacia lo nacional, así mismo hace mayor énfasis en el tema minero energético en Colombia, renegociar pactos, hace énfasis en la soberanía, hace mayor énfasis en la protección de la naturaleza, del medio ambiente, y la protección de la diversidad étnica comunidades indígenas, afros, mestizos, desde sus lógicas y dinámicas no desde la integración al modelo del mercado neoliberal, sino desde su saber, cosmovisión y apuestas desde lo que son, así mismo replantea el papel del desarrollo urbano en tanto que termina excluyendo a gruesas capas de la población, destruye tejido social colectivo y determina la reorganización del campo en función de la producción y sostenimiento de las ciudades. Son varios los temas que integraría y daría dinamismo a las discusiones nacionales, regionales, populares, en este cambiante escenario de país.
Esta es la Colombia que tenemos, esa es la realidad por la cual debemos trabajar; ahondando en procesos que rescaten al sujeto, al ser humano, la defensa del medio ambiente, el potenciamiento del pensar crítico. Es preciso entonces, fortalecer las luchas, entregando vida, energía, ideas, acciones colectivas por la construcción de otra sociedad.
¡Tarea compleja, pero urgente y necesaria!
Referencias.
Ante la actual crisis de sentido, es necesario “rescatar al sujeto". (2013). El Agora USB, 2, 10-23.doi:http://dx.doi.org/10.21500/16578031.117
Derecho a la Paz, Articulo 22 (Constituciòn Polìtica de Colombia 1991).
El Espectador. (06 de 12 de 2015). “Perdón Bojayá”: Farc. Obtenido de El Espectador: http://www.elespectador.com/noticias/politica/perdon-bojaya-farc-articulo-603910
Gobierno Colombiano y las FARC-EP. (24 de 08 de 2016). Acuerdo Final para la Terminacion del conflicto y la construcciòn de una Paz estable y duradera. Obtenido de mesadeconversaciones.com.co:
https://www.mesadeconversaciones.com.co/sites/default/files/24_08_2016acuerdofinalfinalfinal1472094587.pdf
La Republica. (09 de 10 de 2016). “Estábamos buscando que la gente saliera a votar verraca”: Juan Carlos Vélez. Obtenido de Kavilando: http://kavilando.org/index.php/2013-10-13-19-52-10/confllicto-social-y-paz/4887estabamos-buscando-que-la-gente-saliera-a-votar-verraca-juan-carlos-velez
Redaccion Politica. (31 de 08 de 2016). Firma oficial de acuerdo final de paz con las Farc será el próximo 26 de septiembre. Obtenido de El Espectador: http://www.elespectador.com/noticias/politica/firma-oficial-deacuerdo-final-de-paz-farc-sera-el-prox-articulo-652178
Redaccion Politica y EFE. (15 de 06 de 2014). Juan Manuel Santos, reelegido Presidente de la República. Obtenido de El Espectador: http://www.elespectador.com/noticias/politica/juan-manuel-santos-reelegido-presidente-derepublica-articulo-498487
Registradurìa Nacional de la Repùblica de Colombia. (09 de 10 de 2016). Resultados Plebiscito 2 de Octubre de 2016.
Obtenido de Registadurìa Nacional de la Republica de Colombia: http://www.registraduria.gov.co/99st/index.html
UARIV. (3 de octubre de 2016). Registro Unico de Victimas. Obtenido de Unidad de Victimas: http://rni.unidadvictimas.gov.co/RUV
* Docente Investigador de la Universidad de San Buenaventura, integrante del grupo de investigación Kavilando y de la Red Interuniversitaria por la Paz (REDIPAZ) Contacto: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. – www.kavilando.org














