Por: Coordinación Colombia Europa Estados Unidos
Diferentes estudios que hacen referencia a responsabilidades por violaciones a la vida originadas en violencia política, atribuyen a los organismos de seguridad y sus aliados paramilitares una responsabilidad compartida entre el 74% y el 80% de estos homicidios
Al día de hoy, el número de víctimas del conflicto armado en Colombia registradas por la Unidad Nacional de Víctimas es de más de 7.620.000 personas.
Muchos de los hechos victimizantes han sido perpetrados de manera masiva y sistemática, es decir, han sido perpetrados como parte de un ataque a gran escala, masivo, frecuente y lanzado de manera colectiva sobre un número múltiple de víctimas (carácter generalizado) y además llevados a cabo de manera organizada, conforme a una política o un plan, lo que se demuestra por la identificación de pautas o patrones de comisión.
Desde el año 1958 hasta el año 2012 el gubernamental Centro Nacional de Memoria Histórica documentó cerca de 220.000 personas muertas en el marco del conflicto, de las cuales más de 81% corresponden a asesinatos selectivos de civiles (más de 177.300 personas).
En el mismo período esta entidad documentó la ocurrencia de 1.982 masacres en las cuales fueron asesinadas 11.751 personas.
Además de las masacres y los asesinatos selectivos, en Colombia también la desaparición forzada se ha practicado de forma sistemática y generalizada.
La Unidad para la Reparación a las Víctimas reconoce en Colombia la existencia de 45.630 personas que han sido víctimas directas de desaparición forzada, hasta agosto de 2015
Diferentes estudios que hacen referencia a responsabilidades por violaciones a la vida originadas en violencia política, atribuyen a los organismos de seguridad y sus aliados paramilitares una responsabilidad compartida entre el 74% y el 80% de estos homicidios.
En el informe “Basta Ya” del Centro Nacional de Memoria Histórica se referencia que a la responsabilidad conjunta de Paramilitares y/o Fuerza Pública se adjudica el 74,3% de las víctimas de los asesinatos selectivos cuando el actor responsable fue identificado, y el 80% de las víctimas de masacres perpetradas por actores que pudieron ser identificados.
Este porcentaje de responsabilidad de Fuerza Pública-Paramilitares sube notoriamente a un 83,9% de los casos en los casos de desaparición forzada, en tanto que un 2,3% de los casos señalan a las guerrillas como responsables.















