Es nuestro deber seguir dejando constancias públicas ante el país y ante el mundo sobre los crímenes de persecución que seguimos enfrentando, por parte del Estado y del Para-Estado. Los paramilitares siguen presentes y actuantes en los alrededores de los asentamientos de nuestra Comunidad de Paz, ejercen el control, se movilizan por las veredas, amenazan, anuncian masacres, presionan el desplazamiento o el confinamiento, impiden la circulación de alimentos, convocan a reuniones, exponen sus normas y reglas, todo bajo la tolerancia y complicidad de la fuerza pública.
• El martes 6 de diciembre de 2011, hacia las 20:30 horas fue Incinerado por hombres armados un autobús de servicio público en la vía entre Apartadó y San José.
• El domingo 11 de diciembre de 2011, hacia las 20:00 horas en el corregimiento de San José una persona encapuchada portando arma corta ingresó a un pequeño negocio administrado por el señor Jorge Mario Higuita, el hombre armado le disparó en repetidas ocasiones, pero este logró huir ileso. Cabe señalar que en este caserío hace presencia permanente policías y militares.
• Entre los días 13 y 16 de diciembre de 2011 en las veredas los
Mandarinos y Aguas Frías, fueron asesinadas tres personas, entre ellas una menor de
edad, los asesinos portaban armas largas y camuflados. Estos hechos han
generado desplazamiento de algunas familias. En esa área existe una base
paramilitar de la cual hemos dejado constancias.
• El jueves 15 de diciembre de 2011, a las 05:00 horas, salieron
de la base de Piedras Blancas (municipio de Carepa) doce paramilitares vestidos con
camiseta oscura, pantalón de sudadera y armas largas, atravesaron durante
el día por las veredas de Belencito, Cristalina/Carepa, Miramar, la Miranda
donde retuvieron a un poblador durante 20 minutos, allí lo amenazaron y le
prohibieron hablar sobre lo sucedido, después continuaron al resguardo
indígena de Las Playas, llegando a Caracolí, vereda ubicada en la carretera
entre Apartadó y san José hacia las 18:00 horas. Allí se encontraba el
Ejército, en un retén militar habitualmente ubicado en ese sitio. Los
paramilitares departieron amigablemente con los militares y se quedaron
allí.
No se trata de acciones nuevas para nosotros, como tampoco el descaro con
que lo hacen y la forma en que luego lo niegan acusando a nuestra Comunidad
de Paz de mentirosa. Eso ha sido lo habitual durante casi dos décadas.
Nuestra Comunidad, entre sus principios fundantes, se opone a la impunidad
y se compromete a visibilizar estas infamias ante el país y el mundo para
que se juzgue la justeza de nuestra lucha. Nuevamente agradecemos a
quienes, desde muchos rincones del mundo nos han dado y nos siguen dando su
apoyo moral.
Comunidad de Paz de San José de Apartadó














