QUE NO SEA LA MUERTE, SINO LA VIDA QUE NOS HAGA OPTAR POR LA PAZ.
La muerte en combate de Raúl Reyes es un golpe duro en la historia de la insurgencia colombiana. Esta acción afecta seriamente la dirección, el Frente Internacional, la vocería pública y la estrategia de las FARC.
No creo que esto sea el fin del fin, pero sí creo que después de las grandes marchas del pueblo contra el secuestro, el desplazamiento y todas las demás formas de violencia, no hay otro camino distinto que la solución política del conflicto que termine definitivamente con la violencia.
El último congreso del ELN tomó la decisión de trabajar permanentemente por una salida política del conflicto. En el momento se viene dando una profunda discusión sobre la continuidad del Proceso de Paz con el Gobierno.
Duele la muerte de cualquier luchador por los cambios sociales. Me duele que se dilapiden estas vidas de revolucionarios que pueden, todavía, contribuir a la construcción de una Colombia mejor.
Es hora de preguntarnos ¿se incrementará la guerra? ¿Qué es lo urgente para el pueblo colombiano, la guerra o la paz? ¡Yo he optado definitivamente por la paz y la reconciliación de los colombianos que acabe con la repetición de la guerra!
Ahora el peligro es caer en un ciclo de retaliación y violencia, la oportunidad está dada un Acuerdo de Consenso Nacional por la Paz ¿quién nos convoca?
Francisco Galán
Casa de Paz, marzo 1 del 2008