En un nuevo pronunciamiento, el Comando Central del Ejército de Liberación Nacional (ELN) reafirma su compromiso con la búsqueda de una paz con transformaciones estructurales en Colombia, en medio de la creciente crisis del proceso de diálogo con el gobierno nacional. El comunicado, fechado el 21 de abril de 2025, plantea críticas directas al presidente Gustavo Petro, denuncia incumplimientos del Estado y llama a la sociedad a no desistir en la construcción de un país distinto.
Por: Alfonso Insausty Rodríguez - REDIPAZ-
Un llamado a la sociedad civil
El ELN destaca los esfuerzos de diversos sectores sociales comprometidos con una salida negociada al conflicto armado, y los invita a fortalecer los procesos de participación democrática en torno a la propuesta de un Acuerdo Nacional por las Transformaciones. Para la insurgencia, este horizonte —plasmado en la Agenda de México y el Acuerdo Número 28— es esencial para trascender el modelo de guerra heredado de las oligarquías tradicionales.
Críticas al gobierno y crisis en la mesa de diálogo. El comunicado denuncia que el proceso de negociación ha entrado en crisis por lo que califican como “reiterados incumplimientos” del gobierno. Según el ELN, el Ejecutivo ha pretendido imponer el modelo fallido de Desarme, Desmovilización y Reintegración (DDR), desconociendo la naturaleza política de la insurgencia y replicando lógicas contrainsurgentes de desprestigio y represión.
Un contexto de tensión y preelectoralismo. En un tono crítico, el ELN advierte sobre la instrumentalización de la paz como estrategia de “politiquería” en tiempos preelectorales, y llama a no dejarse arrastrar por la desesperanza. La misiva insiste en que la paz debe ser un compromiso genuino de la sociedad y no una herramienta de cálculo político.
¿Hacia dónde va la Paz Total?. Este nuevo episodio evidencia las tensiones acumuladas en el proyecto de “Paz Total”, una política ambiciosa del actual gobierno que ha buscado abrir múltiples frentes de diálogo con distintos actores armados. Sin embargo, las dificultades en la implementación de los acuerdos, la fragmentación de interlocutores armados, y la creciente presión militar en los territorios, han debilitado su credibilidad y viabilidad.
En este escenario, el futuro del diálogo con el ELN permanece incierto. Mientras el gobierno defiende su enfoque, sectores sociales y organizaciones de base insisten en la necesidad de avanzar hacia una paz que transforme las causas estructurales del conflicto: la desigualdad, la exclusión, y el abandono estatal en amplias zonas del país.
-Comunicado completo:
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