A partir de las opiniones propias y las de un significativo grupo de pensionados y ex funcionarios de EPM y de la misma UNE, se presenta en su nombre pero bajo la entera responsabilidad del suscrito, algunas reflexiones que permiten concluir la inconveniencia de entregar la operación de UNE a un tercero.
Complementa un documento colectivo del 4 de marzo, titulado “SOBRE LA PROPUESTA DE FUSIÓN UNE –TIGO” el cual contiene un breve contexto de porqué se llegó a la situación actual y una serie de inquietudes e interrogantes cuya respuesta es necesaria para dar luces en el análisis del tema.
Expone, sin profundizar en ello porque no es su propósito ni está a su alcance juzgar hechos pasados, la necesidad de no repetir decisiones de negocio que han producido incontables pérdidas en UNE en su afán de incursionar en movilidad, con consecuencias que han trascendido a su situación actual
SOBRE EVENTUALES SINERGIAS DE LA FUSIÓN UNE TIGO
La red de TIGO (Colombia Móvil) fue instalada con el objetivo de ofrecer voz móvil y ha sido objeto de mejoras o actualizaciones que la habilitan además para servicios de datos como mensajes cortos, mensajes multimedia, acceso a Internet de diferentes capacidades. No tiene licencia para televisión y su tecnología NO COMPLEMENTA la infraestructura de UNE ni tiene experiencia significativa en los servicios que hoy presta UNE a través de sus diferentes redes.
Por su parte, UNE tiene una red fija por la cual presta voz, datos, acceso a Internet y televisión. Además es el único operador que dispone de red móvil de 4G-LTE (en la banda de 2500 MHz) la cual ha orientado a la prestación de los servicios de acceso a Internet de gran capacidad. Por esta red también se pueden prestar televisión y datos de gran velocidad. Por el momento no puede prestar voz ya que no hay terminales disponibles en escala comercial, limitación conocida al momento de la adquisición de la licencia 4G-LTE un par de años atrás
No son muchas las sinergias que se puedan lograr entre las redes móviles de TIGO y de UNE, o entre la red fija de UNE y la móvil de TIGO, por cuanto las mismas están diseñadas con alcances diferentes. Por supuesto el mundo ideal sería disponer de una infraestructura tecnológica integrada por medio de la cual se pudieran prestar servicios fijos y móviles, de voz, datos, acceso a Internet y televisión. Pero si se llega a ello no será por virtud de la integración UNE - TIGO sino porque se efectúen inversiones en nuevas infraestructuras. No hay sinergias significativas per se por la integración de las dos empresas. Seguirán existiendo durante mucho tiempo tanto la red móvil de TIGO como la fija de UNE y la móvil de cuarta generación de UNE, tal como se tienen hoy en empresas no integradas. Respecto a la nueva banda que UNE y/o TIGO eventualmente adquieran en la subasta que en próximos días realizara el gobierno nacional, que se supone tendrá una frecuencia distinta, nos inquieta lo que pueda ocurrir, con la licencia, equipos, infraestructura y con los usuarios ya conectados a la actual red 4G-LTE adquirida por UNE.
Seguramente con la eventual integración habría algunas sinergias en aspectos como sistemas de información, facturación, atención clientes y otros propios del negocio pero no en aspectos como utilización de terrenos, equipos de fuerza, torres, redes de transporte, ya que por las condiciones de la subasta, todos los operadores participantes están obligados a compartir esta infraestructura, la cual, en la mayoría de los casos, ya fue adquirida por la firma ATC o por otras compañías que hoy proceden a adecuar estos sitios con el fin de arrendarlos a las empresas que lo soliciten.
SOBRE LOS SERVICIOS QUE PRESTA UNE y SOBRE SU RED 4G LTE
Respecto al espectro disponible de red 4G LTE que tiene UNE, es claro que mientras más alta la frecuencia más atenuación y por lo tanto se requiere más infraestructura tecnológica. Pero lo relevante es que ya UNE dispone del atributo de la movilidad y es hoy el único operador de 4G-LTE en la banda de 2500Mhz. Para ello ha venido haciendo un significativo y meritorio esfuerzo desde el 2010. En consecuencia, en lo que ahora debería enfocar su esfuerzo UNE es en fortalecer su presencia en servicios fijos y móviles de voz, datos, acceso a Internet y televisión con el soporte de la red de 4G-LTE e ir evolucionando o migrando su red fija de forma tal que pueda ofrecer mejores y nuevos servicios fijos y móviles en el esquema multiplay, aprovechando la capacidad que brinda su red. Mientras se cuenta con terminales para servicios de voz, podría incursionar en la prestación de voz IP.
Lo que posiblemente preocupa a UNE es que en la subasta se van a otorgar permisos en la banda de 1.700 MHz (AWS) para nuevos operadores, los cuales pagarán por las licencias un monto menor frente a las compañías que ya operan en el país. De otro lado, estos nuevos operadores tendrán inversiones más bajas que UNE en infraestructura y más diversidad y gama de equipos terminales de usuario (Tablets, computadores, smartphones, etc.). Como esto era conocido, es de suponer que cuando UNE tomó la decisión de adquirir la actual licencia y espectro ya habían sido evaluados estos posibles escenarios.
La gran fortaleza de UNE es que es hoy la ÚNICA empresa que presta todos los servicios de voz, datos, acceso a Internet, televisión interactiva y dispone de la red móvil de 4G-LTE la cual ha sido orientada al acceso a Internet de gran capacidad y por la cual puede también prestar datos y televisión. Sus redes fijas, eficientemente gestionadas, rigurosamente administradas, son una oportunidad y una fuente inmejorable de recursos, como lo son en todas partes del mundo. No obstante los errores cometidos en administraciones pasadas, su flujo de caja es positivo y sus líneas de negocio son competitivas. No se puede perder de vista que UNE es el segundo operador nacional en TV e internet, con más de un millón de clientes en cada servicio. En resumen, debemos afirmar categóricamente que UNE reúne todo el potencial de los servicios de telecomunicaciones. Su situación actual, si bien amerita una reingeniería de fondo y directivos con vocación de permanencia, no es irreversible pues tiene servicios, cobertura y clientes y, lo más importante, tiene el recurso humano y conocimiento técnico, legal, financiero e informático para acometer el reto empresarial que enfrenta.
SOBRE LA PROPUESTA PRESENTADA
Cuestionamos el contenido de la exposición de motivos que acompaña la propuesta presentada a consideración del Concejo municipal porque parece un genérico con el cual se pudiera justificar cualquier actividad. Con esa misma argumentación se habría podido justificar por ejemplo la no compra de Orbitel o soportar la decisión de no incursionar en Wimax, dado que ya se tenía a TIGO y a la misma UNE en el mismo servicio. Su lectura parece incluso controvertir la propia y reciente decisión de incursionar sola en la red de 4G-LTE que ya tiene, lo cual nos parece absurdo porque no tenemos duda que ese es el camino a seguir. Lo que sigue es dedicar todo su esfuerzo a hacer exitosa esa opción empresarial para la cual suponemos se hicieron todos los estudios y evaluaciones del caso.
Aun cuando resulta conveniente cuestionar si es MILLICOM (TIGO) el tipo de socio estratégico que requiere UNE, damos por sentado que respecto al tema de la movilidad, la discusión de si se necesita un socio estratégico ya no tiene sentido porque ya se tiene. Lo que se debería estudiar a fondo son entonces las posibles alternativas para potenciar la convergencia entre lo fijo y lo móvil en la forma que más convenga a la ciudad y a la comunidad.
Es imperativa la necesidad de un estudio integral, profundo y serio de otras posibles alternativas empresariales para UNE, diferentes a la presentada, así como la evaluación rigurosa de la viabilidad de las diferentes opciones resultantes. La cultura de EPM se ha construido sobre la base de que los análisis y estudios preceden a las conclusiones y son determinantes a la hora de adoptarlas.
La administración de UNE debería concentrarse en hacer eficientes sus líneas de negocio y estudiar la manera de aprovechar la existencia de Colombia Móvil u otros posibles socios para hacer alianzas comerciales ventajosas para todos. Es lo que cabría esperar que se estudiara y evaluara con todo el rigor del caso: aprovechar lo que ya tiene sin necesidad de entregar a cambio 60 años de ahorro de la comunidad representados en UNE. Para esto se requiere no solo actitudes diferentes de su equipo directivo, que debe y tiene que creer que es posible, sino también una profunda reingeniería en la orientación de negocio y por supuesto una administración eficiente de UNE, que vaya más allá de proponer su fusión y entrega, como parece sugerirlo la propuesta que nos han hecho conocer.
Porque la propuesta que se nos presenta se podría resumir en la siguiente absurda conclusión: Como no se tiene el control de voz móvil, que en algún momento entregamos, entonces se hace necesario entregar el control total de un negocio decididamente rentable si es bien administrado, para no correr el riesgo de perderlo todo en un mercado en competencia. ¡Curiosa manera de preservar el patrimonio público y salvar la entidad!
Si UNE quiere aprovechar su plataforma de movilidad en este ambiente de convergencia tecnológica, están a la mano las alianzas estratégicas comerciales. Si consideran viable una alianza de largo plazo dejando a UNE como socio minoritario de MILLICOM, ¿por qué no se puede hacer algo similar con el mismo MILLICOM o con otro operador rigurosamente seleccionado, sin necesidad de comprometer el patrimonio público? Esta es una opción atractiva si esa unión garantiza un crecimiento económica y socialmente rentable, a cambio de compartir el mercado colombiano. El margen ebitda de UNE es similar al de TIGO, de manera que no se puede concluir que UNE sea per se ineficiente, con todo y las dificultades que hoy padece la compañía. Lo que requiere es concentrar su acción empresarial en sacar adelante sus actuales líneas de negocio, las cuales están en pleno crecimiento, contrario a lo que plantean de marchitamiento de ingresos, y aprovechar la oportunidad para hacer alianzas en materia de movilidad, que es el campo donde lamentablemente, porque no debería ser así, parece aceptar su debilidad institucional. En otras palabras, defender el patrimonio que le ha sido entregado EN CUSTODIA por sus verdaderos dueños, como son los ciudadanos de Medellín y toda su área de influencia.
Si la propuesta presentada apunta a que el control de la compañía resultante de la fusión esté en cabeza de MILLICOM, lo que de paso hace la propiedad pública insignificante, ¿para que se propone entregar las líneas de negocio de UNE para llegar al mismo punto donde estamos hoy?.
CONCLUSIONES
- La situación actual de UNE es heredada y frente a ella, la obligación de sus actuales directivas es buscar soluciones. No hay dudas de la buena fe de quienes impulsan la propuesta de fusión pero están deficientemente asesorados en la formulación de la solución. No se pueden confundir rapidez y ligereza
- UNE es propiedad de la comunidad y no del administrador ni del alcalde de turno. En tal calidad, su orientación estratégica debe partir de reconocer esa realidad incuestionable, que está en la raíz de la existencia de EPM y de la misma UNE como entidad escindida de aquella. En consecuencia, su acción empresarial tiene que estar dirigida a prestar los mejores servicios de telecomunicaciones, a las mejores tarifas posibles, con una utilidad sostenible que le permita crecer en un entorno complejo y competido. Es imperativo además que sus directivas crean que esa misión es posible y se apliquen con rigor a sacar adelante la entidad.
- Es mucho más lo que UNE agrega a TIGO que lo que recibe. Fundamentalmente porque lo que TIGO ofrece, movilidad, ya lo tiene UNE con su red 4G-LTE y lo que UNE ofrece, NO LO TIENE TIGO. Y lo que podrían hacer juntos lo pueden hacer por la vía de las alianzas, sin necesidad de sacrificar su marca, ni sus activos, ni sus negocios ni su propiedad colectiva. De esa manera se honraría la promesa de campaña del actual alcalde Municipal Dr. Anibal Gaviria C. No se puede incurrir en otro “ORBITELAZO” con consecuencias aún peores que aquel malhadado negocio. Si no obstante todo lo ocurrido todavía se tiene un ebitda tan significativo, qué MARAVILLA de empresa tendríamos hoy de haber sido más cuidadosos en el manejo de los recursos públicos. La pregunta que nos tenemos que hacer es quién necesita más del otro. ¿UNE necesita a TIGO para sobrevivir?, ¿son indispensables los 5 millones de clientes TIGO, casi todos prepago, que tienen un bajo ARPU (ingresos promedio por usuario) en relación con sus competidores, para que UNE sobreviva a futuro?, ¿No será más bien al revés?, ¿No será TIGO quien necesita la plataforma de UNE? ¿Qué pasaría con TIGO por ejemplo si no logra obtener la licencia de 4G en la próxima subasta?
- Con el mayor respeto por el esfuerzo desplegado en la búsqueda de soluciones a la situación empresarial en que recibió a UNE, creemos que la alternativa planteada por la actual administración es la peor de la opciones posibles. Salir precipitadamente a entregar el control a un socio supuestamente estratégico, lo cual todavía está por demostrarse, so pretexto de las dificultades actuales, parece una salida facilista, máxime si se tiene en cuenta que la entidad es rescatable, tiene un flujo de caja positivo y fortalezas evidentes en los servicios de TV, Internet, Acceso de banda ancha y en los servicios móviles de cuarta generación. Pedimos disculpas por la expresión pero la opción planteada es tan débil que sería preferible la venta total de la empresa frente a la posibilidad de quedar como socio minoritario de una compañía multinacional.
ALGUNAS CONSECUENCIAS DE ENTREGAR LA OPERACIÓN DE UNE
Consideramos necesario evaluar detalladamente las consecuencias para la Ciudad de Medellín y para EPM de entregar la operación de UNE a MILLICOM o a un socio operador internacional. Preliminarmente vemos las siguientes:
El Municipio no volvería a tener incidencia en las tarifas cobradas a los usuarios. Si las condiciones de mercado fueran apropiadas para un incremento desproporcionado de las mismas, así se haría, sin muchos miramientos sociales.
El apoyo brindado a través de UNE a programas tipo RUTA E, masificación del Internet, empresarismo, financiación de terminales, puntos de Internet gratuitos, entre otros, no podrían hacerse salvo que el Municipio de Medellín pagara a tarifas comerciales el costo de estos programas sociales.
Si las contribuciones dadas por los estratos 4 y 5 y comerciales fueran insuficientes para cubrir los subsidios requeridos por los estratos más bajos, esta diferencia tendría que ser asumida por el Municipio.
Es muy probable que UNE se vea abocado a pagar por el uso de la marca TIGO y a contribuir a algún fondo corporativo de propiedad de MILLICOM para invertir en el posicionamiento de la marca alrededor del mundo, afectando negativamente las utilidades de la compañía.
Es muy probable que UNE tenga que pagar por las asesorías y conceptos tecnológicos brindados por MILLICOM en el montaje de las nuevas redes, afectando negativamente las utilidades de la compañía y encareciendo el valor de la inversión.
Es muy probable que los empleos que hoy genera UNE se eliminen y la función sea realizada por funcionarios de otros países en que opera MILLICOM, generando desempleo en la ciudad y posiblemente un mayor costo para UNE.
MILLICOM tendría plena autonomía para la venta de activos y líneas de negocio a un tercero.
Es muy posible que el talento humano capacitado y formado al interior de UNE sea trasladado a otras operaciones de MILLICOM en el mundo, sin pagar contraprestación a UNE por trasladarlos.
Es bastante difícil poder realizar auditoría y control a todas las posibles transacciones entre UNE y su controlante MILLICOM en relación con tráfico entrante, tráfico saliente, comercialización de productos, compra de tecnología, apoyos de informática, servicios de Call Center, entre otros.
En la eventualidad que MILLICOM como socio operador hiciera una mala gestión de marca, de tecnología, de servicios o de gestión de mercados y los resultados se vinieran abajo, ¿responderían por la destrucción de valor? ¿Podría hacer cambios el Municipio de Medellín? ¿Qué capacidad real tendría la Ciudad para proteger su patrimonio?.
Si por causa de los diferentes servicios cobrados por MILLICOM se redujeran las utilidades, ni el Municipio ni EPM volverían a percibir dividendos por la operación de UNE.
QUE SE ESPERA DEL CONCEJO DE MEDELLÍN
De la lectura del proyecto de acuerdo en discusión llama la atención el rol marginal que la Administración Municipal y EPM le asignan al Concejo de Medellín en la discusión del tema. De su contenido se desprende que la pretensión de sus autores es que el Concejo levante en términos genéricos la restricción que impuso al momento de autorizar la escisión del patrimonio de EPM y posterior creación de la sociedad que hoy en día es UNE.
Nos parece que el Municipio de Medellín y EPM no han sido muy claros en explicar cuál es en concreto la opción empresarial que pretenden desarrollar para UNE una vez se obtenga la autorización genérica por parte del Concejo de Medellín. Se ha hablado de fusión pero no nos queda tan claro que lo que se quiere hacer corresponda a la figura de la fusión societaria. Se ha hablado de integración, opción que se puede materializar de distintas formas, incluida la celebración de una alianza comercial, la misma que se puede instrumentar tanto desde la celebración de un contrato como mediante la constitución de una nueva persona jurídica.
Teniendo en cuenta que se quiere obtener una autorización genérica, de ser aprobado el proyecto de acuerdo en los términos originales en que fue presentado, el día de mañana se podría explorar sin límite alguno cualquier tipo de negocio con otros terceros, incluida la desinversión casi total en la Compañía (bastaría con conservar una acción para respetar los términos del proyecto, tal como ha sido presentado).
Lo que está en discusión es nuevamente la orientación estratégica que la ciudad le debe dar a su empresa de telecomunicaciones. Siendo el Concejo de Medellín el guardián final del patrimonio de la ciudad, consideramos que lo correcto es que sea quien evalúe y decida en concreto la nueva orientación estratégica de la Compañía y que no se limite, vía la expresión de una autorización genérica y abierta, a validar la propuesta del Municipio de Medellín y EPM, propuesta que, con los pocos elementos que se han suministrado públicamente, en últimas representa la renuncia a un modelo de administración exitoso durante décadas y la entrega del control de UNE a un tercero de cuestionables comportamientos como socio en Colombia Móvil.
UNA ALTERNATIVA DIFERENTE PERO POSIBLE
- En resumen, hoy la ciudad tiene las siguientes alternativas sobre la mesa:
Seguir igual con UNE, con el riesgo de seguir perdiendo dinero como consecuencia de desacertadas decisiones empresariales. Opción completamente descartable
Hacer un ejercicio de reingeniería profunda para revertir la situación recibida así como evaluar rigurosamente opciones de alianzas comerciales, sin comprometer su propiedad ni sus activos.
Vender la empresa y recuperar su valor actual. Opción que competería decidir a la comunidad en forma directa, como dueña que es de la entidad.
Entregar el control y padecer la situación de ser un accionista minoritario, sin dividendos, sin control, sin gestión de tarifas y sin generar empleo en la ciudad, tal como hoy ocurre con TIGO. Consideramos esta la peor de las opciones posibles
Pero existe otra posibilidad que bien vale la pena discutir y analizar:
En vez de entregar el control a un extranjero sin una contraprestación clara, la propuesta sería, enmarcada en una estrategia de región, continuar la operación de UNE como una empresa enfocada en el servicio a la comunidad, ofreciendo Internet al costo, teniendo como objetivos centrales el facilitar la educación de sus habitantes y apoyando la competitividad. En otras palabras, ver a UNE como un instrumento para entregar dividendos al ciudadano normal, al verdadero dueño de la entidad, algo así como centrar su accionar en ofrecer servicios para la ciudad de Medellín y el Departamento de Antioquia.
Siempre que se tratan estos temas surge el discurso de la necesidad de jugar en grandes ligas, de la inevitabilidad de ser parte de multinacionales con músculo financiero, de ser los más grandes, de disponer de la última tecnología ¿Es para eso que existen EPM o UNE? ¿Se trata de ser importantes o simplemente de ser UTILES y de aportar a la calidad de vida y a la competitividad de su área de influencia? En materia de telecomunicaciones deberíamos renunciar de una vez por todas a esas pretensiones faraónicas porque nunca vamos a ser grandes y no creemos que haya sido ni sea esa la razón de existir de UNE.
Así de simple pero así de profundo!!!!