Por: Gonzalo López Gaviria
Es contundente, hubo fraude, colusión y corrupción en la adjudicación de estos dos proyectos por parte de Empresas Públicas de Medellín.

Es contundente, la ingeniería Hidroituango falló desde los diseños hasta la ejecución parcial y fallida obviamente, proyecto difícilmente viable de recuperar por componentes técnicos, jurídicos, sociales, ambientales y financieros.
Es contundente, EPM y la ingeniería Colombiana está fallando recurrentemente; la petulancia de EPM, la petulancia de los ingenieros, la sed de ganancias exorbitantes, la ausencia de ética social y empresarial, el “importaculismo” y la corrupción han hecho trizas la infraestructura, y los actores directos están vueltos trizas como instituciones e industria creíble para el común de los ciudadanos. La trama del proyecto es una película de ficción en cuanto a la colusión que se estableció para favorecer al Consorcio Adjudicatario – CONSORCIO CCC – (Camargo Correa de Brasil – Conconcreto S.A. – Coninsa Ramón H. S.A), ficción porque es increíble que a pesar de las pruebas presentadas por los oferentes competidores en el proceso de contratación a través de observaciones y alegatos jurídicos, técnicos y financieros que demostraron una colusión y un favorecimiento a carta sellada, se haya adjudicado este proceso sin ningún signo de ruborización por parte de la Alcaldía de Medellín y EPM ante lo evidente del direccionamiento del proceso de contratación, esa audiencia fue por decir lo menos, grotesca. A disposición grabaciones de dicha audiencia que también las tiene EPM
. Lo peor fue que los oferentes exponían los argumentos de manera contundente y el comité evaluador y las más altas autoridades gubernamentales de la Alcaldía de Medellín, impávidas, sentados como estatuas, modulando a través de apoderados solo lo necesario; pero lo peor de lo peor, fue el carácter de los asistentes a esta audiencia pública de adjudicación, no fuimos capaces de pararnos y decir, señor alcalde, han sido argumentos contundentes sin respuesta satisfactoria y ante tanta evidencia y ante tales respuestas, la ciudadanía merece respeto, EPM no es de ustedes señores autoridades municipales y menos señores directivos de EPM y mucho menos del comité evaluador; este proceso está viciado jurídicamente en su evaluación y adjudicación y EPM es de los ciudadanos y para ellos; pero que va, estamos en Colombia viendo como se favorecen intereses personales a través de la colusión, y a fin de cuentas, nuestra permisibilidad es la que genera la impunidad.
Si van a investigar tienen que ahondar en la trama, en su historia, en cómo se conformó la colusión desde el inicio de la venta del diseño del proyecto que Integral S.A., le hizo a su aliado histórico, EPM y a la estructura organizativa y accionaria de EPM; tienen que ahondar en quién realmente diseñó los pliegos de condiciones, tienen que preguntarle sobre la trama a Sergio Fajardo y a Federico Restrepo (Presidente de Integral – Gerente de EPM – Secretario de Infraestructura Gobernación de Antioquia) que fueron los estructuradores iniciales para formalizar y encarrilar todo a largo plazo y favorecer finalmente al consorcio que estaba dispuesto a colusionarse para eliminar la competencia y obtener beneficios personales.
Tienen que ahondar en las Juntas Directivas de EPM, altos funcionarios de EPM, gobiernos de turno, comités de diseño de pliegos de condiciones y comité evaluador. No les salió bien y ahora nos tienen envueltos en la #solidaridad con EPM, no señores, acá hubo fraude en la adjudicación del proceso de contratación y el proyecto falló. El proyecto técnica y financieramente estuvo muy bien soportado e institucionalmente apoyado debido a su importancia estratégica, existía credibilidad en los estudios y diseños que iniciaron gracias al Ingeniero José Tejada en el año de 1969, pero el proyecto falló por la colusión, la corrupción y obviamente por la ejecución que hizo de Hidroituango un proyecto fallido y catastrófico desde todo punto de vista.
La trama es larga y escabrosa pero es más aterrador y más grave el silencio de todos. La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales que se está construyendo en Bello es otro proyecto que aún no ha fallado pero que si fue fallido jurídicamente en su adjudicación, no tuvo tantos espectadores y revuelo como Hidroituango pero la contundencia de la colusión fue grotesca, la audiencia pública de adjudicación fue y pasó desapercibida, de nuevo autoridades municipales, junta directiva de EPM, comités de diseño de pliegos de condiciones, comité evaluador del proceso de contratación, aplicando el “importaculismo” adjudicaron a la Hyundai por encima hasta de la mínima lógica jurídica, técnica y financiera. Ahonden en informes de evaluación y adjudicación en la PTAR de Bello, ahonden en presupuesto inicial y lo que se ha gastado a hoy, ahonden en el cronograma de ejecución y verán despropósitos.
Ahonden quién era el gerente de Aguas en EPM durante la etapa de publicación de pliegos y adjudicación, un pedante directivo, que aún al final de proceso y estando por fuera de EPM por jubilación, el, muy orondo, controló desde la tribuna la trama en la evaluación y adjudicación de la PTAR de Bello que desde 2001 a 2017 proyectó para la integralidad del proyecto U$ 917 millones de dólares equivalentes a pesos de hoy a $2.6 BILLONES de pesos así: Inicio de construcción: Septiembre de 2012 Fecha estimada de finalización: Septiembre de 2015 Caudal de diseño: 5 m3/s Interceptor Norte Inicio de la construcción: abril de 2011 Longitud: 7.7 km Sistema constructivo: Utilización de una nueva tecnología en nuestro medio – máquinas tuneladoras o TBM (Tunnel Boring Machine) para la construcción del Interceptor Norte. Fechas estimada de finalización: Diciembre de 2014 Financiación: contrato de préstamo No. 2120/OC-CO EPM cuenta con un crédito aprobado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), por un monto de USD 450 millones para la ejecución de la Segunda Etapa del Programa de Saneamiento del río Medellín.
Inversiones ejecutadas 2001-2012 (valor en pesos corrientes de cada año) • Redes de recolección y transporte: US$195 millones • Construcción y optimización de sistemas de tratamiento:US$97 millones de dólares Total 2001-2012: US$292 mill Inversiones proyectadas 2013-2017 (valor en pesos constantes) • Redes de recolección y transporte: US$262 millones • Construcción y optimización de sistemas de tratamiento:US$364 mill Total 2013-2017: US$626 mill TOTAL INVERSIÓN PERIODO 2001 – 2017 US$917 millones Fuente: presentación en PPT de EPM;
AHONDEN en pliegos, oferentes, reclamos, evaluación y adjudicación para que vean lo grotesco del “importaculismo” y la pedantería de EPM y colusionados. Ahonden en cómo va hoy el avance de un proyecto silencioso o silenciado, fallido en su legalidad y en sus ejecutorias al día de hoy. La petulancia, el poder, el hambre de dinero, el hambre de utilidades exorbitantes, la cultura corrupta de los que ostentan el poder a todo nivel y que es la política gerencial de estos actores, y que además, es la sangre y la genética que los mueve porque son un entramado de delincuentes arropados por las marcas y las corbatas, representan la anti ética humana y dirigente, y es hora ya que caigan y paguen por su obscena obesidad criminal.
Es hora de desenmascarar la trama que aprovecharon indigna y criminalmente personas que ostentaron y ostentan el poder en instituciones respetadas, respetables, admiradas y decentes que creíamos poseer, y que hoy, pagaremos consecuencias económicas gracias a delincuentes profesionales que hoy viven opulentos y sonrientes, seremos nosotros los ciudadanos y clientes de EPM que inequívocamente pagaremos con preceptos de #solidaridad para salvaguardar criminales desfalcadores que actuaron en contravía de la ley y del principio obvio de la honestidad.
Habrá que ver si pólizas Hidroituango, pólizas PTAR de Bello PAGARÁN, habrá que ver si EPM, Alcaldía de Medellín, Gobernación de Antioquia, IDEA, podrán soportar semejante carga financiera y semejante flujo de caja comprometido a futuros que están comprometidos y comprometiendo los accionistas naturales de Hidroituango y la PTAR de Bello, en la realidad somos nosotros, y seremos los que pagaremos sin falta las facturas EPM#solidaridad con incrementos exorbitantes, pero que delincuentes integrales, aplicando el “importaculismo”, hoy viven en la opulenta clandestinidad permisiva, y ni siquiera cuestionada y menos investigada. Parece que sólo se permitiesen dos minutos de semejante catástrofe en todo noticiero Si no fuese por los videos transeúntes no veríamos nunca nada de nada ¿Será que EPM y contratistas no instalaron cámaras para registrar todo y posteriormente sacar al aire el paquete promocional para una vez “terminado” Hidroituango hacer documentales y exposiciones?
¿Será que otra vez no va a pasar nada y con #solidaridad paguemos el enriquecimiento ilícito de los actores intelectuales y materiales de la catástrofe Hidroituango?
¿Será que nadie va a ahondar en la PTAR de Bello? El “Topo Gigio”, un muñeco de la tv de los 70s decía ¿Por qué seráááá?
GONZALO LÓPEZ GAVIRIA
Veedor Ciudadano
tomado de: http://eljodario.co/2018/05/19/informe-de-veeduria-sobre-epm/













